Blog: La Psicología en Reproducción
Las dificultades reproductivas (más conocido como infertilidad) afecta a hombres y mujeres en proporciones aproximadamente iguales y causa considerable sufrimiento personal y familiar.
La evaluación de la fertilidad puede llegar a ser emocionalmente difícil e incluso traumática, y convertirse en una amenaza para la imagen emocional, física y sexual de cada quien.
Al evaluar las dificultades reproductivas se aborda también la esfera sexual, en algunas parejas estas interrogantes sobre sexualidad, prácticas del coito, su duración, etc., pueden causar cambios en el comportamiento sexual, o producir una disfunción sexual, lo que trae aparejada la evitación del contacto sexual y todo eso puede ensombrecer el pronóstico.
La ciencia en fertilidad y tratamiento de esta ha avanzado muchísimo en los últimos años, pero el aspecto emocional aún no es abordado con el mismo ahínco. Las parejas con dificultades reproductivas experimentan alteraciones emocionales importantes y su impacto puede llegar a ser peor sobre la función y satisfacción sexual.
Una de las repercusiones en la esfera sexual puede ser las insatisfacciones y las disfunciones.
Las personas con dificultades reproductivas pueden sentir que están “dañados o defectuosos” y esto se extiende a su sentido de valor, autoestima e imagen corporal; llevándoles a sentirse sexualmente poco atractivos, y disminuir el impulso sexual, con menor capacidad en la respuesta sexual y menor disfrute de su sexualidad.
Por momentos las parejas con infertilidad después de tiempo en consulta llegan a tener sentimientos de frustración y desespero, y pueden llegar a tener conductas asexuales mientras dicen entre si que para qué preocuparse por el sexo, si no hay oportunidad de un embarazo.
En ocasiones la relación sexual adquiere un matiz de "trabajo" o "tarea obligatoria", más que un carácter placentero.
Durante el estudio y tratamiento de las parejas uno puede acusar al otro de no participar por igual en el tratamiento y evaluación, y en respuesta a ello uno u otro puede ser más demandante de sexo, otras veces se niegan a mantener relaciones sexuales y pueden producirse disfunciones sexuales que complican aún más la situación (por ejemplo: eyaculación retardada, disfunción eréctil, vaginismo, dispareunia, disminución del deseo sexual, anorgasmia, etc.)
La disfunción sexual eréctil tiene impacto psicológico fundamentalmente, pues son muchas las ocasiones que hay que "tener un programa de sexo", donde las relaciones sexuales se mantengan en días fijos independientemente del deseo; o hay que tomar muestras del semen, lo que inquieta y preocupa al hombre, y como respuesta surgen imposibilidades de la erección.
Se podría decir que algunas parejas podrían tener dificultades en la esfera sexual debido a:
✅ Dispareunia (dolor durante el coito motivado en ocasiones por patologías orgánicas, en otros por una actitud no positiva ante la relación sexual).
✅ Enfoque del sexo orientado sólo con el fin de la reproducción.
✅ Relación sexual enmarcada en un "programa sexual" con cumplimiento obligatorio, sobre todo en los posibles días fértiles del ciclo.
✅Mala imagen corporal disminución del autoestima, ambivalencia afectivo-sexual, sensación de culpabilidad de las parejas por las dificultades reproductivas / infertilidad.
👩🏻⚕️Lic. Clara Medina - Psicóloga Perinatal y Reproductiva - Máster en Infertilidad